viernes, 8 de agosto de 2008

Sentados en aquel café...

Y ahí estaba yo.. Sentado frente a un desconocido para quien yo no lo era...

-Como te llamas? - me pregunto...
-Yo soy... - Me detuvo...
-Ya se quien eres...-
-¿Y por qué me has preguntado? - Pregunte
-Quería saber si tu sabes quien eres... -
-¿Cómo no voy a saber quien soy? -
-Bueno, dime entonces quien eres.. -
-Yo soy... - Dudé - No lo sé... ¿Quién soy? - Lo tonto que soné diciéndolo...
-Es una buena pregunta, pero ¿Qué tal si la dejamos para mas tarde? -
- Bueno, entonces, ¿De qué quieres hablar? - Pregunte intrigado
-Empieza diciendome como llegaste aquí... -
-He salido con la necesidad de hablar con alguien.. y sin saber a donde me dirigía... -
-Llegaste a este lugar... Así llegue yo... -
-Ah, y ¿Por que tenias necesidad de hablar? - Esto se pone bueno pensé -
-Nunca sabré decírtelo, creo que fue por melancolía, ya sabes, "cosas de amores" - Y rió por lo bajo -
-Ah, ya veo, ¿Piensa contarme de sus amores? -
-Puede que lleguemos a eso... -
-Ah, esta bien.. - hice una pausa y pensé - Aún no me has dicho tu nombre - Reclamé.
-Y tampoco te lo diré... - Se detuvo - Dejemos que el tiempo te lo diga, ¿Te parece? -

Aquí haré una pausa...
Así empezó nuestra conversación que nunca termino...
Pero aun no he descripto a este hombre. Empezare por su rostro, que creo esa cuadrado, o filoso. Su pelo era negro pero puede que ya tuviera canas, sus ojos eran profundos y de su color, de su color ya no me acuerdo. Creo que tenia una "chiva", o quizás era un bigote, no, estoy seguro de que era una espesa barba.
¿Su edad? No, nunca tocamos ese tema, le gustaba evitarlo y ya se darán cuenta. Pero, yo que soy muy observador, creo que podría darle unos 60, si es que no tenia 50 o rondaba los 40, pero casi seguro tenia 70.

Ahora continuo con lo que dijimos.

-Bueno, como quieras, no me dirás tu nombre -
-Y ¿Qué edad tienes muchacho? -
-16 años -
-Ah! Un adolecente, un joven! Jaja! Pareces un tanto mayor... - Dijo alegremente -
-Si... jaja... -Aun no se si estubo bien que me riera - Y ¿Usted? -
-No me trates de usted, puedes "tutearme" - Sonó muy gracioso que lo dijera un hombre de su edad... Más tarde me parecería gracioso llamar a un sabio como "Vos" - Y ¿Cuales fueron las razones de que salieras de tu casa en busca de una charla? - Nótese que evitó la pregunta de su edad -
-No lo se, solo sentí esa necesidad... Creo que fue por melancolía -
-Es una de las mas grandes compañeras del hombre... -
-¿Quién? - Todavía me cuesta creer que hice una pregunta tan estúpida -
-La melancolía... -
-Ah! Si! -

Y así empezamos nuestra charla...

Alan [Sentados en aquel café]

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encanta tu forma de escribir....la forma unica que tenes de expresarte....quiero seguir la historia...me parece muy buena....

FUCSIA dijo...

HOLAAAA ALAANNN!!!!!!!!!!!!!!
MUY BUENA LA HISTORIA!!!!!!!!!!!!
ES MUY INTRIGANTE.....
Y ADEMAS ESCRIBIS MUY BIEN!!!!!!!!
QUIERO LEER COMO SIGUE LA HISTORIA
NOS VEMOS AMIGASO...
BESOTOTOTE
CATA;-)